La directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), Mariela Castro Espín, en la clausura a la 1ra. Reunión Técnica Nacional Violencia de Género, Prostitución, Turismo Sexual y Tráfico de Personas, declaró que el evento contribuyó a la construcción de propuestas concretas para el tratamiento de estas temáticas.
“Nuestra aspiración es que no solo nosotros sigamos trabajando esta área específica, tan difícil e importante, como parte del Programa Nacional de Educación y Salud Sexual, sino que también se incluya en la política de los organismos aquí presentes”, comentó la sexóloga y apuntó que es preciso lograr una estrategia en conjunto y no de sectores o feudos.
“Con estos encuentros Cuba va a salir fortalecida”, puntualizó Castro Espín.
Esta sesión, desarrollada este martes en el Hotel Nacional de Cuba, fue continuidad y clausura del 1er. Simposio Internacional Violencia de Género, Prostitución, Turismo Sexual y Tráfico de Personas, celebrado del 28 al 30 de noviembre en La Habana.
Funcionarias y funcionarios de diferentes entidades nacionales participaron en esta reunión para discutir el documento técnico surgido del Simposio, y proponer acciones que involucren a los organismos participantes en el abordaje de las temáticas tratadas.
Como parte de esta jornada se presentaron las ponencias La verdad frente a los mitos. La Prevención y el control social de la Prostitución y la Trata de Personas en Cuba, de la Dra. Tania de Armas Fonticoba, profesora principal de Criminología de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana; yAspectos generales sobre la temática de la trata de personas y otras formas de abuso sexual en cuba, de Yoandrys González García, oficial del Ministerio del Interior.
Ambas presentaciones marcaron pautas para el debate, así como el análisis que realizó González García del Informe de Cuba sobre el enfrentamiento jurídico-penal a la trata de personas y otras formas de abuso sexual, documento presentado en octubre pasado por la Ministra de Justicia, María Esther Reus.
El estado peligroso y las medidas de seguridad predelictivas: espadas de Damocles
El asesor jurídico del CENESEX, Manuel Vázquez Seijido, llamó la atención sobre la discutida problemática de los índices de peligrosidad, el estado peligroso y la aplicación de medidas de seguridad predelictivas que implican internamiento, y sus vínculos con el fenómeno de la prostitución.
“Creo que no podemos esperar más para pronunciarnos sobre este tema”, confesó el jurista y aclaró que en Cuba no está penalizada la prostitución, no obstante, cuestionó lo que está sucediendo con la interpretación de los índices de peligrosidad, y declaró su oposición al internamiento como medida de seguridad en los casos donde la supuesta conducta antisocial se asocie al ejercicio de la prostitución.
Vázquez Seijido explicó que “las medidas de seguridad predelictivas han quedado desterradas de la mayoría de las legislaciones penales del mundo, y aunque en algún momento resultaron herramientas importantes para determinadas cuestiones, en otras situaciones pueden convertirse en espada de Damocles”.
Sobre la situación de las mujeres que se dedican a la prostitución y son atendidas en lo que se denominó “casas de acogidas o aseguradas” –tema que protagonizó esta parte del debate–, la directora del Proyecto Palomas, Lizette Vila, opinó que sus visitas a centros de este tipo no le permitieron comprender la finalidad de estos.
“El ambiente que presencié y la relación que tuve con esas mujeres, la mayoría de ellas jóvenes, fue algo muy duro para mí. Siento un dolor muy grande porque en Cuba existan esos sitios”, reflexionó Vila.
“No creo que podamos usar términos como aseguradas o acogidas porque esas nomenclaturas no funcionan. Son personas que están viviendo en condiciones de privación de libertad”, apuntó la psiquiatra Ada Alfonso, experta en el tema de la violencia contra la mujer.
Alfonso llamó la atención acerca de lo recogido en la información científica y estadística, donde se expone que el sexo transaccional se da en mayor número entre hombres, “resulta que para eso no hay ninguna medida, son las mujeres las que permanecen en estos centros”, reflexionó la psiquiatra.
El Jefe del Departamento de homicidios de la Dirección General de Investigación Criminal de Operaciones del Ministerio del Interior, Teniente Coronel Mirel Fernández, estuvo de acuerdo con lo mencionado sobre la prostitución masculina, tanto heterosexual como homosexual. “Contradictoriamente hacemos mucho menos contra esta que contra la femenina”, reconoció.
El oficial declaró que esta falta de acciones para tratar el tema está condicionada por mitos, incluido el machismo, que impiden visibilizar la problemática. También se refirió al estigma asociado a las prácticas homosexuales, que conduce a realizarlas de manera clandestina, lo que desencadena crímenes de odio, marginalidad y poca percepción de riesgo.
Tanto la prostitución femenina como la masculina son cuestiones que necesitan un abordaje desde distintas disciplinas, además de un tratamiento institucional más allá del índice de peligrosidad y las casas de acogidas, coincidieron los criterios.
Darle voz a la prensa nacional
Durante su presentación, el funcionario del Ministerio del Interior, Yoandrys González García reconoció que un reto en el abordaje de estas problemáticas es “ser capaces de publicar lo que estamos haciendo”, e involucrar a la prensa cubana en este proceso.
Reconoció cómo la prensa internacional ha dado un vuelco en la manera de presentar el tema, pues si bien antes se aprovechaban de casos de trata para denunciar la existencia del fenómeno en Cuba, ahora se percibe un cambio en los titulares, y mencionó como ejemplo la repercusión favorable que tuvo el mencionado informe presentado por la Ministra de Justicia.
La directora de la Editorial de la Mujer y experta en género y comunicación, Dra.C. Isabel Moya Richard, reafirmó la importancia de “enfrentar el fenómeno con todas sus aristas, sin temer a las cifras, y profundizar en cuáles son las características de la problemática en Cuba y cómo debemos tratarla”.
De acuerdo con lo planteado por González, Moya reconoció que estas cuestiones pueden ser objeto de manipulación porque no son tratadas con la suficiente transparencia y valentía, de ahí la importancia de reconocer nuestros desafíos y fortalezas para avanzar.
Según González, la población cubana muchas veces peca de ingenua al permitir, en el caso de los extranjeros, acercamientos a las familias y sobre todo a las jóvenes, situaciones que pueden propiciar la prostitución y la trata. En este sentido, volvió a referirse la importancia de visibilizar estos asuntos, porque como refirió Ada Alfonso durante el debate, “las personas no pueden prevenir lo que no conocen.”
Al respecto, la psiquiatra alertó que no debe perderse de vista la cuestión de los determinantes sociales. “Si hoy existen condiciones económicas desfavorables, continuarán viniendo sujetos al país a buscar servicios sexuales y abusar de niñas y adolescentes cubanas, porque van a encontrar familias que también tienen este tipo de conductas”.
Alfonso reconoció la importancia de este Simposio por tratar estos temas y reunir especialistas con interés en acordar soluciones.