“De este encuentro lo que más nos interesa es aprender, recibir experiencias y después llegar a un consenso de propuestas para la definición de políticas en nuestro país sobre el tratamiento de esta problemática”, informó la directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), Mariela Castro Espín, a propósito del Simposio violencia de género, prostitución, turismo sexual y tráfico de personas, que se desarrollará en la capital cubana del 28 al 30 de noviembre próximo.
Especialistas e investigadores de prestigio internacional en el tratamiento de la temática participarán como ponentes en el evento: Adriana Piscitelli, de Brasil; Santos Rosario Ramírez, de República Dominicana; Patsy Sôrensen, de la belga Fundación Payoke; Jorge R. Volnovich, de Argentina; y las cubanas Dra. C. Clotilde Proveyer Cervantes Dra. Ada Alfonso, son algunas de las personas expertas que ofrecerán conferencias durante las sesiones del Simposio, que tendrá como sede el Hotel Nacional.
El evento, que se celebrará en el contexto de la Jornada Cubana de Prevención de Violencia Contra la Mujer, es una oportunidad “para expresar el compromiso de nuestra sociedad con la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo, Cairo más 20, específicamente, para lograr avanzar en lo acordado en materia de derechos sexuales y educación integral de la sexualidad con enfoque de género, derechos humanos y diversidad”, plantea la nota conceptual del certamen. (Ver nota conceptual del evento)
La directora del CENESEX subrayó la importancia de la participación de un grupo de expertos de Suecia, país que inició, desde hace más de una década, la penalización al consumidor de servicio sexual.
“Muchas personas que disfrutan del servicio sexual están aterrorizadas de que impulsemos esta idea en Cuba –refirió la sexóloga–, yo la impulsaría, porque es el cliente quien crea la demanda y siempre desde un lugar de poder”.
En cuanto a la legislación vigente en el país sobre el tema, Castro Espín apuntó que si bien en la Isla no se penaliza a la muchacha o muchacho que se prostituye, sino al proxeneta, “existen políticas que no han sido suficientemente positivas desde el punto de vista educativo en relación con el tratamiento a la persona que se prostituye –valoró–, hay que trasmitirle los elementos para que de manera autónoma y responsable decida qué hacer, pero no se debe acosar para que no lo haga; eso no funciona, está demostrado”.
La sexóloga confesó que en la institución que lidera existe insatisfacción con respecto al modo en que estas problemáticas son tratadas desde la comunicación y la educación. “Cuando hablamos de prostitución no decimos: ´eres malo o mala porque te prostituyes´, sino: ´debes saber que te conviertes en mercancía sexual, y al hacerlo pierdes derechos, por lo que te subordinas a la ley de la oferta y la demanda; quien te paga, te exige; tienes que ser consciente de esa realidad´”, recalcó.
“Cuando una persona va a emigrar, deberíamos explicarle todos estos elementos para que no lo haga de manera ingenua y no sea víctima del trafico, de la prostitución y el abuso”, opinó sobre esta problemática.
“He asistido a centros de mujeres maltratadas en Europa y he visto que muchas de ellas son inmigrantes latinoamericanas, pero también de países pobres del Oriente, Medio Oriente, Europa del Este y de la propia Europa. Hay quienes piensan que los europeos no tienen estos problemas; pues sí. Las y los jóvenes mal atendidos y con situaciones de conflictos familiares son muy vulnerables a esa cacería especializada de personas inescrupulosas que se ocupan del tráfico. Esto les ocurre a niñas, niños, muchachas y muchachos en Europa, no solamente a sus inmigrantes. Es un problema mundial”, agregó.
Sobre el abordaje del tema en el Simposio, la directora del CENESEX mencionó que el contacto con instituciones, investigadores, líderes de estudios y de esfuerzos por enfrentar estas problemáticas en Europa y América Latina, permitirá “dialogar a nivel profesional por parte de todas las instituciones del Estado cubano interesadas en abordar el tema para obtener las mejores prácticas y sus aprendizajes”.
Agregó que estas personas expertas han manifestado interés en “venir a comunicarnos lo que han aprendido, los resultados de sus investigaciones para que Cuba pueda tomar medidas en la defensa de estos problemas, para defender a su población, informarla, apoyarla, darle los recursos y que no emigren de manera ingenua: que sepan a dónde acudir cuando tengan algún tipo de problema. Creo que lo mejor que le podemos dar a nuestra población es eso: mucha información, muchos conocimientos, no mirarlos con desprecio porque deciden emigrar de manera superficial, al contrario, sentir pena y asumir la responsabilidad de trasmitirle toda la información que necesiten”.
“La educación de la sexualidad es justamente eso: aportar información para que tengan la libertad de decidir de manera responsable. Es lo que nosotros hacemos en nuestro trabajo, ya que la sexualidad es una parte de la vida del ser humano que ha sido tan maltratada históricamente, utilizada como un mecanismo de control, de coerción y dominación. Hay que sacar los temas variados de la sexualidad de esa posición en la que se han encontrado a lo largo de la historia”, reflexionó la sexóloga.
También como parte del Simposio se presentará el libro Lo cuentan las mujeres, que contiene las narraciones premiadas en el concurso Historia de Mujeres; el volumen es una de las más recientes publicaciones de la Editorial CENESEX. El ser y la mercancía, prostitución, vientres de alquiler y disociación, de la autora sueca Kajsa Ekis Ekman, es otro de los textos que se presentará en el certamen.
Además, se realizarán los paneles Prostitución, turismo sexual y tráfico de personas. Análisis de la situación actual en Cuba y Violencia de género. Desafíos en la realidad cubana.
Este Simposio se ha organizado por el CENESEX en colaboración con la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).